China intensifica sus esfuerzos a través de estímulos monetarios .
Los recientes estímulos monetarios anunciados por el Banco Popular de China (PBoC) han generado reacciones positivas en los mercados, con un impulso significativo en las bolsas chinas y un aumento notable en los precios de los metales. Analistas, como los de Danske Bank, consideran que las medidas han superado las expectativas iniciales, pero aún no son suficientes para provocar un cambio profundo en la economía del gigante asiático. Señalan que estos estímulos monetarios deben ser complementados con políticas fiscales para tener un efecto más duradero.
Aunque las medidas han aumentado la confianza en los mercados, algunos expertos, como Ipek Ozkardeskaya de Swissquote Bank, advierten que el repunte en los activos chinos puede ser frágil hasta que los estímulos se traduzcan en mejoras económicas tangibles. Además, Mitsubishi UFJ Financial destaca que los recortes de tipos y el apoyo al mercado inmobiliario y bursátil han sido clave para restaurar la confianza, pero aún queda por ver si estos esfuerzos lograrán impulsar un crecimiento sostenible.
El reto principal radica en que estas acciones podrían haber llegado demasiado tarde para que el gobierno alcance su objetivo de crecimiento del 5% este año, estimándose que China solo crecerá un 4,8%. Desde TD Securities subrayan que China está tratando de evitar una situación de deflación como la que enfrentó Japón en décadas pasadas, y si bien el paquete de estímulos del PBoC es ambicioso, insisten en la necesidad de estímulos fiscales adicionales para estabilizar completamente la economía.
